El sistema NAR300, instalado en un colector de lodos de drenaje cerca de un depósito o una zona de bombeo, proporciona una excelente detección de fugas de aceites petroquímicos, vegetales, etc. Las tecnologías de horquilla vibrante y conductiva se combinan con una lógica a 2 niveles para ofrecer una salida sencilla, segura y altamente fiable para la monitorización de fugas.
Dos sensores independientes se combinan para una detección precisa de fuga de líquidos
Una sonda conductiva detecta líquidos acuosos o no acuosos
Una horquilla vibrante confirma si existe aceite o aire
La ausencia de piezas móviles y su prolongada vida útil reducen los costes de mantenimiento
Una alarma se activa si el cable se deteriora o el agua se congela, y asegura un funcionamiento a prueba de fallos
Funciona con líquidos solubles no acuosos independientes de la constante dieléctrica